¡Terremoto en la NFL! Amon-Ra St. Brown consigue un contrato monstruoso. Los Lions no sólo elevan a su receptor al tope de la nómina de su grupo de posición, sino que le otorgan la etiqueta extraoficial de «superestrella». Un comentario

¡Amon-Ra St. Brown ha llegado! Ha llegado a la NFL, ha llegado al Olimpo de la NFL. En este país ya se ha seguido muy de cerca la trayectoria de este germano-estadounidense de 24 años. Porque eso es exactamente lo que es aquí: una superestrella.

No son muchos los alemanes que llegan a la NFL y, desde luego, no son muchos los que llegan a la élite. St Brown ha demostrado su valía y ahora es el mayor nombre de Alemania en la NFL… ¡de todos los tiempos!

Al menos eso dice su nuevo contrato. Puede que Amon-Ra no tenga (todavía) un título de la Super Bowl a su nombre como Sebastian Vollmer, por ejemplo. Pero el valor equivalente de St Brown no puede medirse en un anillo. Ahora es la franquicia.

Amon-Ra logró algo que ni siquiera el ganador de la Super Bowl pudo conseguir. Al igual que St. Brown, el tackle ofensivo floreció hasta convertirse en una absoluta estrella. Sin embargo, nunca se convirtió en el rostro de una franquicia. Para ser justos, simplemente no había forma de superar a Tom Brady en los New England Patriots.

St Brown no se queda sólo en buenas actuaciones en Detroit. Junto con el quarterback Jared Goff, dirigió la larga reconstrucción de la franquicia. Con estas dos piedras angulares, el equipo ha mejorado año tras año. La temporada pasada, hicieron su primera aparición en los playoffs en ocho años. Incluso consiguieron contra los Rams su primera victoria en playoffs en 33 años.

Amon-Ra no tardó en hacerse indispensable. La temporada pasada aportó 1.515 yardas de recepción, la tercera mejor cifra de la liga, y diez touchdowns. Ahora recibe el reconocimiento (monetario) de los Lions.

St. Brown firma un megacontrato que podría reportarle hasta 120 millones de dólares en el futuro. De ellos, 77 millones están garantizados. Con un salario anual de unos 30 millones de dólares, el receptor se sitúa entre los que más ganan en su posición.

El «Dios del Sol» comparte el primer puesto nada menos que con el mejor receptor de pases, Tyreek Hill. Los Lions ponen a St. Brown al mismo nivel que uno de los mejores receptores de los últimos años. Un dos veces campeón de la Super Bowl y ocho veces Pro Bowler. Un honor para St. Brown, una declaración de los Lions.

Al mismo tiempo, deja atrás a otros grandes nombres entre los receptores abiertos. Davante Adams, Cooper Kupp, Justin Jefferson, sólo por nombrar algunos. Por cierto, ahora incluso marca la pauta en las negociaciones salariales con otros receptores. St Brown abandona la élite (exclusivamente) alemana y entra en el Salón de la Fama de la NFL.

Los Lions premian a su superestrella por una temporada leonina y con toda la razón