Miedo a la maldición: los aficionados de los Chiefs no deberían adornar con camisetas la famosa estatua de Rocky Balboa en Filadelfia, exige Travis Kelce.

Rocky Balboa vistió la camiseta de los New York Giants, de los New England Patriots, también de los San Francisco 49ers. Y una bufanda de los Minnesota Vikings. Se ha convertido en una tradición adornar la estatua del héroe de las famosas películas de boxeo en Filadelfia, a los aficionados rivales les gusta hacer esta gracia antes de los partidos de fútbol americano contra los Eagles, pero les sale el tiro por la culata una y otra vez. Hay una maldición;

«Chiefs, no toquéis el maldito monumento a las Rocosas», fue por tanto el último llamamiento del profesional de la NFL Travis Kelce con la vista puesta en la próxima Super Bowl del lunes por la noche. El tight end de Kansas City Chiefs, rival de los Eagles, tampoco quiere que el desastre alcance a su equipo.

Los Giants perdieron en 2015 después de que la estatua que se alza bajo las escaleras del Museo de Arte se vistiera con la camiseta azul. Los Vikings fueron víctimas de la maldición en el Juego por el Campeonato de la NFC en 2018, y los Patriots semanas después. Antes de la Super Bowl LII, Rocky se enfundó una camiseta del entonces quarterback de los Pats, Tom Brady, y las Águilas vencieron a Nueva Inglaterra para ganar su primer título de la NFL.

Pero los aficionados parecen no haber aprendido nada de aquello. Hace poco más de quince días, los 49ers estaban en la ciudad para disputar la semifinal de los play-off, así que Rocky, encarnado en las películas de la estrella de Hollywood Sylvester Stallone, recibió una camiseta roja. San Francisco perdió 7-31.