El sueño de Desmond Watson de jugar en la NFL con los Tampa Bay Buccaneers se había esfumado antes del inicio de la temporada. Ahora, el jugador más pesado de la historia de la liga tiene una nueva oportunidad.

Así fue la historia tras el Draft de la NFL de 2025: los Tampa Bay Buccaneers ficharon a Desmond Watson, el jugador más pesado de la historia de la liga, un increíble tackle defensivo que en aquel momento pesaba 210 kilogramos.

Sin embargo, su sueño de jugar en la NFL se esfumó en verano. Como consecuencia de la reducción de la plantilla a 53 jugadores, Watson fue despedido. Lo más amargo fue que el defensa ni siquiera pudo demostrar su valía en los entrenamientos con los Buccaneers, ya que su peso le impedía hacerlo. Por ello, los entrenadores solo dejaron que Watson entrenara individualmente durante la pretemporada.

Sin embargo, tras la tercera semana de la temporada actual, el jugador de 22 años recibió buenas noticias, ya que los Bucs incorporaron al exjugador de los Florida Gators a su equipo de prácticas.

Según informa «ESPN», Watson realizó entrenamientos con la franquicia la semana pasada y el equipo quedó impresionado por sus progresos físicos.

Desmond Watson: el entrenador de los Bucs aclara los rumores sobre el «tush push»

El entrenador jefe Todd Bowles desmintió que Watson fuera fichado solo porque Tampa Bay se enfrenta esta semana a los Philadelphia Eagles con su temido «tush push».

«Ha entrenado bien. Pero nunca lo ficharíamos solo para detener un Tush Push. Si fichamos a un jugador para detener una jugada y luego el Tush Push no se produce, estamos perdiendo el tiempo», explicó el entrenador jefe Todd Bowles. Los Buccaneers creen más bien en el potencial de Watson: «Si lo fichamos, es porque creemos que puede jugar, no solo por Filadelfia».

Sin embargo, Bowles frenó el entusiasmo, al menos por el momento: «Es muy poco probable que esté listo para jugar después de que lo hayamos recuperado, al menos no para el partido contra Filadelfia».

Desmond Watson: la lucha contra el sobrepeso avanza

El equipo incluso había incluido al grandullón en la «lista de enfermedades no relacionadas con el fútbol» durante la pretemporada debido a su sobrepeso. Debía concentrarse únicamente en perder peso.

Al comienzo del campo de entrenamiento, Bowles describió el procedimiento de la siguiente manera: «Se trata simplemente de convertirlo en un jugador mejor y más sano y de ponerlo en el campo». Sin embargo, el entrenador no reveló públicamente un peso objetivo concreto ni una fecha límite.

Según los medios de comunicación, Watson redujo su peso a unos 198 kilogramos, pero eso no fue suficiente para los Bucs, lo que llevó a la separación temporal.

Tras su regreso, no se ha revelado el peso exacto de Watson, pero la cadena «ESPN» describe al novato con un peso de al menos 180 kilogramos.

Para poner el peso en perspectiva: antes de Watson, los jugadores más pesados de la historia de la NFL que habían sido seleccionados en el draft eran los linieros ofensivos Trent Brown y Daniel Faalele, con 172 kilogramos cada uno.

En la universidad, con los Gators, el tackle defensivo convenció a pesar de su peso, o quizás precisamente por él: no se perdió ningún partido en cuatro años y consiguió 63 placajes y 1,5 sacks. En Tampa Bay, Watson firmó inicialmente un contrato de tres millones de dólares tras el draft, de los cuales solo 70 000 estaban garantizados.