Antonio Gates entra en el Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional de la NFL y hace historia.

Antonio Gates ha hecho historia. El sábado, a sus 45 años, se convirtió en el primer jugador que nunca ha jugado al fútbol americano universitario en entrar en el Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional de la NFL.

Tras 16 temporadas en los San Diego Chargers y Los Angeles Chargers, con 116 touchdowns, ocho participaciones en el Pro Bowl y tres nominaciones al All-Pro, ahora tiene un busto en el Salón de la Fama de Canton, Ohio.

Gates había jugado con éxito al baloncesto durante su época universitaria, pero los ojeadores de la NBA no lograron clasificarlo en ninguna posición, por lo que ofreció a los ojeadores de la NFL una prueba.

Aunque no jugó al fútbol americano durante su etapa universitaria, un total de 19 equipos anunciaron que querían verlo entrenar a modo de prueba.

Al final, Gates acabó en los Chargers, que lo ficharon como agente libre en 2003 y lo mantuvieron en sus filas hasta 2018.

Gates da las gracias a su exentrenador

En su discurso de agradecimiento, declaró: «Cambiar de deporte puede ser una experiencia que te cambia la vida. Las oportunidades inesperadas suelen ser las más impactantes, porque pueden reorientar tu vida por completo, si estás dispuesto a aprovecharlas».

En este sentido, Gates dio las gracias especialmente a Tim Brewster. El exentrenador de tight ends de los Chargers lo había visto jugar al baloncesto y le había animado a que, en tres años, llegara a ser un tight end All-Pro.

En su discurso de casi 24 minutos, Gates también animó a aquellos que quieren escapar de las bandas callejeras, la violencia o las drogas, y se describió a sí mismo como «la prueba viviente» de que todo es posible si se es «disciplinado, se mantiene el rumbo, se tiene corazón, se trabaja duro y nunca se deja de creer».

Gates da las gracias al exquarterback Rivers

También dirigió un agradecimiento especial a su quarterback de tantos años: «Philip Rivers, lo que teníamos en el campo de fútbol americano era algo especial. No eras solo alguien que lanzaba el balón. Eras el corazón de la ofensiva. Tu fuego, tu pasión, tu inteligencia eran insuperables».

Y continuó: «Veías el juego igual que yo. Tú confiabas en mí y yo confiaba en ti, y esa confianza nos llevó a algunos de los mejores momentos de mi carrera», añadió Gates. «Siempre sabía dónde iba a ir el balón. Philip Rivers, ha sido un gran placer jugar contigo».

El dúo Rivers/Gates cuenta con 89 touchdowns conjuntos, el segundo mejor registro de un dúo de quarterback y tight end en la historia de la liga.

Rivers, emocionado por las palabras

Rivers se mostró muy emocionado por las palabras de su compañero y declaró posteriormente a «Chargers.com»: «Ha hecho un trabajo fantástico. Lo que nos emocionó a él y a mí fue que mencionara a todos sus compañeros por su nombre. Había tantos compañeros, y son las personas las que hacen que todo esto sea tan especial».

Y Rivers añadió: «Nuestra amistad, la confianza que hemos construido, era algo especial. Siento que este es un final especial para su historia. Por fin ha escrito el último capítulo de su libro».