Dos alemanes se han asegurado su puesto en la temporada 2025 de la NFL. El resto lucha por un puesto en la plantilla y por buenas perspectivas en la liga.

Por ahora, en la NFL reina la calma antes de la tormenta. Antes de que todo se decida, también para los alemanes en la mejor liga de fútbol americano del mundo.

Luego llega la preparación para la nueva temporada. El campo de entrenamiento, la pretemporada. Para estrellas de la talla de Amon-Ra St. Brown y Brandon Coleman, se tratará de dar los últimos retoques y coordinarse con sus compañeros de equipo.

Jugadores como Jakob Johnson, pero también Leander Wiegand, Lenny Krieg o Julius Welschof luchan sobre todo por entrar en la plantilla de 53 jugadores.

Pero, ¿cuál es la situación actual de los alemanes en la NFL?

Amon-Ra St. Brown (Detroit Lions)

La superestrella entre los jugadores alemanes, pero también una de las grandes estrellas de la NFL. Es imprescindible en la ofensiva de los Detroit Lions y, desde hace años, un receptor fiable para el quarterback Jared Goff.

En sus cuatro temporadas en la NFL, el jugador de 25 años ha acumulado 4851 yardas y 33 touchdowns, además de haber sido seleccionado tres veces para el Pro Bowl. El año pasado ya renovó su contrato hasta 2028. Con los 120 millones de dólares que puede ganar, el menor de los tres hermanos St. Brown también se encuentra entre los receptores mejor pagados de la liga.

Una cosa está clara: tras dos años en la ventana del Super Bowl, los Lions quieren volver a luchar por el título esta temporada, después de haber quedado eliminados en la final de conferencia y en la ronda divisional.

Por lo tanto, también está claro que St. Brown, con sus habilidades, no solo será muy solicitado en el camino hacia la ansiada participación en la Super Bowl, sino que volverá a ser una figura clave.

Brandon Coleman (Washington Commanders)

Coleman fue seleccionado en la tercera ronda del Draft de la NFL de 2024 por los Washington Commanders. Con la 67.ª elección, los Commanders se aseguraron los servicios de este gigante de 1,98 metros y más de 145 kilos. En su primera temporada, se ha consolidado de inmediato como un liniero fiable.

Coleman, con su juego, le dio a otro gran talento el tiempo necesario para lanzar pases o correr por su cuenta: Jayden Daniels. El quarterback novato también le debe a Coleman el haber podido lucirse, ya que este, como tackle izquierdo, protegió el «lado ciego» de su mariscal de campo.

Y lo hizo tan bien y con tanta autoridad que se consolidó como titular a lo largo de la temporada y fue una garantía para que los Commanders llegaran sorprendentemente a la final del campeonato. Allí se enfrentaron a los Philadelphia Eagles, que acabaron proclamándose campeones.

Pero es probable que los Commanders vuelvan a tener un papel importante en la lucha por los playoffs en 2025. Coleman volverá a ser una pieza esencial del rompecabezas.