Conmoción para los Cincinnati Bengals. En un entrenamiento, la superestrella Joe Burrow se lesiona de tal gravedad sin ayuda de un rival que no puede abandonar el campo por sus propios medios y se lo tienen que llevar en coche. ¿Qué ocurre después?

¿Qué pasó? Tras un snap, el quarterback de 26 años quiso abandonar el pocket y conseguir espacio. Poco después, Burrow sintió un dolor, saltó sólo sobre su pierna izquierda y acabó sentándose en el césped.

Al susto inicial le siguió la primera buena noticia. Burrow sufrió una lesión en la pantorrilla, y no en el ligamento cruzado anterior ni en el tendón de Aquiles, como se temió en un principio.

En una rueda de prensa el viernes, el entrenador Zac Taylor anunció: Burrow estará de baja «varias semanas», pero no dio una cifra exacta. El tejido muscular de la pantorrilla derecha estaba «dañado».

Burrow se perderá el resto del campo de entrenamiento de los Bengals. También está descartado para la pretemporada, si es que estaba previsto que jugara.

Todavía no está claro si está en peligro el inicio de la NFL el segundo fin de semana de septiembre.

Ja’Marr Chase había dado un ligero visto bueno a «The Athletic» el martes: «Siempre nos asentimos el uno al otro. Me ha dicho que está bien. Es un tipo fuerte».

¿Otra vez problemas con Burrow?

No es la primera vez que la preparación de los Bengals se ve alterada por una lesión de su playmaker. En 2022, Burrow tuvo que someterse a una apendicectomía durante el campamento. En 2021, se recuperó de una rotura del ligamento cruzado anterior.

A pesar de todos sus problemas, el jugador de 26 años se había convertido recientemente en uno de los mejores jugadores de la liga. En tres temporadas en la NFL hasta ahora, Burrow tiene 11.774 yardas de pase y 82 touchdowns (con sólo 31 intercepciones).