Tom Brady era un gran fan de los San Francisco 49ers cuando era niño. Sin embargo, cuando se convirtió en profesional, su amor por el equipo se convirtió en aversión.

Tom Brady creció como fan de los San Francisco 49ers, solía ir al estadio con su padre y admiraba a la superestrella de entonces, Joe Montana. Pero su amor de fan terminó rápidamente tras su carrera universitaria.

En su último episodio del podcast «Storytime with Tom Brady», el jugador de 48 años explicó que su lealtad hacia el equipo de su ciudad natal desapareció de repente cuando este lo pasó por alto seis veces en el draft de la NFL de 2000 y, en su lugar, seleccionó a Giovanni Carmazzi en la tercera ronda.

Brady no fue seleccionado por los New England Patriots hasta la sexta ronda, en la posición 199.

Para contextualizar: Carmazzi nunca jugó un partido de temporada regular con los 49ers y hoy en día trabaja como pastor de cabras. Brady, por su parte, ganó siete veces la Super Bowl y está considerado el mejor jugador de la NFL.

«Cada vez que jugaba contra los Niners, solo quería dejar una cosa clara… que habían elegido a un pastor de cabras antes que a mí», dice Brady: «Y eso nunca lo he olvidado».

Los 49ers se decidieron dos veces en contra de Brady

Los 49ers habían ojeado a Brady cuando aún jugaba en la Universidad de Michigan. Pero, al parecer, no les convencieron sus habilidades.

Brady se tomó muy mal esa decisión. «Mi lealtad hacia los Niners se esfumó cuando me pasaron seis veces por alto en el draft de 2000», aclara.

Los 49ers tuvieron más tarde una segunda oportunidad.

Cuando Brady se convirtió en agente libre en 2020, según los informes, consideraron ficharlo, pero finalmente se decidieron por el quarterback Jimmy Garoppolo, que había sido suplente del «GOAT» en los Patriots.

Brady fichó por los Tampa Bay Buccaneers y ganó la Super Bowl en su primera temporada. La franquicia californiana, de gran tradición, lleva más de 30 años esperando ese título.