Las cosas no mejoran para los Cleveland Browns. Tras la detención del novato Quinshon Judkins por violencia doméstica, el informe policial incrimina al running back. Las acusaciones de la presunta víctima son muy graves.

Las acusaciones contra Quinshon Judkins no cesan. Al contrario: ahora ha salido a la luz el informe policial. Tras la detención del jugador estrella de los Cleveland Browns el sábado, la presunta víctima se ha pronunciado sobre las acusaciones de violencia doméstica.

Según estas, Judkins «le golpeó con el puño en la boca y la barbilla» y, posteriormente, «le propinó varios golpes más en el brazo izquierdo y el muslo».

Según ha declarado la presunta víctima, en un primer momento no quiso acudir a la policía para no poner en peligro la carrera del running back. Sin embargo, tras hablar con su familia, cambió de opinión.

El informe policial afirma que la víctima «todavía tenía hematomas visibles en la zona de la barbilla» el 12 de julio. Además, en una foto del 8 de julio «se ven claramente hematomas».

Judkins también se enfrenta a una sanción de la NFL

Judkins, de 21 años, que jugó en la universidad para Ohio State y Mississippi, ha sido puesto en libertad bajo fianza de 2500 dólares, según CBS News Miami. Se le ha prohibido acercarse a la víctima y se le ha prohibido el acceso a armas de fuego.

En la última selección de talentos, Judkins fue elegido por los Cleveland Browns en la posición 36. El joven es uno de los 30 jugadores seleccionados en la segunda ronda que aún no han firmado sus contratos.

Independientemente de la situación contractual, el incidente hace que el novato sea susceptible de recibir una sanción por parte de la liga en virtud de la Política de Conducta Personal. Aunque aún no ha firmado ningún contrato, ya entra en el ámbito de aplicación de esta directriz.